OBJETOS DE ADORNO Y USO PERSONAL DEL CASTRO DE VIGO

 Las diferentes campañas realizadas desde el inicio en el castro de Vigo, en concreto en el poblado castreño que se extiende por todo el monte, nos pudieron documentar numerosos objetos, fabricados en diferentes materiales, que nos hablan de los objetos de adorno y uso personal que los habitantes poseían y que mostraban sin lugar a duda, la posición social de las personas que los utilizaban, pues la gran mayoría de ellos procedían del comercio con otras zonas geográficas del imperio romano y suponían un desembolso económico importante para los que compraban estos productos importados. No hay que descartar la fabricación propia de algunas piezas sencillas de bronce, pues se han localizado en las excavaciones fragmentos de moldes, crisoles y escorias de este metal.

Estos objetos de adorno y uso personal se refieren a pequeñas piezas de diferente tipología y materia, que cumplía una función relacionada con el atuendo y vestimenta utilizada por los habitantes del castro, así como con objetos o elementos que nos acercan a los pequeños adornos que formaban parte de las joyas que eran usadas para realzar su presencia dentro de la comunidad, así como otros destinados para la aplicación de productos estéticos. De los primeros nos hablan sobre todo, la gran cantidad los imperdibles (fíbulas), localizadas y que eran usadas para sujetar la ropa que vestían. De los últimos nos dan cuenta, los alfileres o agujas del cabello (los denominados, “acus crinalis”) usados por las mujeres para recoger, separar y peinar el pelo, aunque tenemos otros alfileres más pequeños, pero bien decorados, que se utilizaban para sujetar las prendas de vestir. También las pequeñas cuentas de collar o pulsera, tanto de bronce como de pasta vítrea; diversos anillos; colgantes; etc. Asimismo nos están informando de este mundo personal privado, por un lado, el hallazgo de una aguja, un dedal y una tijera, vinculadas a la confección textil o al mundo de la estética, como son la pequeña espátula y cucharilla.

Por la materia con la que fueron fabricados podemos clasificarlos en objetos de bronce, vidrio, pasta vítreas y piedra semi-preciosa.

De los primeros destacan las diversas fíbulas o imperdibles usados para sujetar su vestimenta textil o de cuero, que nos presentan una muy bien definida cronología, en base sobre todo, a la tipología de las mismas, que nos hablan de los cambios o tendencias que se iban produciendo durante siglos en este tipo de piezas de adornos. Los nombre de las mismas hacen alusión a la forma que presentan (“de largo travesaño sin espira”, “ de apéndice caudal”, “de charnela y arco triangular”, “en forma de media luna”; “de pie alto”, “anulares, de aro interrumpido, circulares o en omega”..); o por la procedencia de las mismas (“trasmontanas”, hispánicas).

La cronología que poseemos para este tipo de piezas es muy amplia, al igual que su pervivencia, por lo cual es muy importante tener en cuenta el contexto en que fueron encontradas para poder determinar mejor su datación cronológica y si poseemos otros elementos bien datados, como monedas, cerámicas de importación o fechas de Carbono-14,..que nos ayuden a buscar los años o siglos en que fueron utilizadas. Las fechas más antiguas que tenemos en el Castro de Vigo, pueden llevarnos desde el siglo IV antes de Jesucristo hasta el siglo II después de Jesucristo, siendo el momento mejor representado el siglo I después de Jesucristo, que va a coincidir con el periodo de mayor auge del poblado.

También van a ser muy abundantes los alfiles o agujas para el cabello y para las túnicas. Se van a conocer con el nombre latino de “acus crinalis” y van a mostrar como pasaba con los anteriores objetos, una variada tipología y dimensiones, que nos van una secuencia cronológica bien fácil de seguir.

Tenemos luego un pequeño colgante pero de curiosa forma lanceolada, de 3,5 centímetros de largo, 0,7 centímetros de ancho y 0,3 centímetros de grosor mínimo. En la parte superior posee un pequeño orificio para facilitar la suspensión. Este tipo de adorno supone un paso cronológico, dejando atrás los de forma amorcillada, fusiforme o acampanados, de una cronología anterior, siendo datado éste, hacia mediados del siglo I antes Jesucristo.

Se localizaron, diferentes pequeñas cadenas de variadas medidas y grosor de sus anillas o aros, que pudieron poseer diferentes funciones (collares o pulseras, o parte de ellos; complemento de otras joyas; etc.)

Asimismo poseemos también cuentas de diferentes formas y medidas para collares o pulsera y también un pequeño anillo de sección elíptica que mide 1,8 centímetros de diámetro.

Mencionar el hallazgo de una espátula entera de 11,8 centímetros de largo, variando su grosor desde 1 milímetro en su parte plana (para extender el producto) y 4 milímetros en el extremo opuesto ( para sujetar y manejar la misma). Ejemplos cercanos los poseemos en castros leoneses y del norte de Portugal, con una cronología similar a la nuestra, esto es, siglo I después de Jesucristo.

Relacionada con esta peculiar pieza, tenemos una pequeña cucharilla incompleta, que sin duda, entra en el apartado de objetos de uso personal, asociados con la cosmética y el uso personal.

Para finalizar este apartado poseemos una parte de una tijera, un dedal entero y decorado que mide aproximadamente 1,6 centímetros de diámetro y unas finas agujas de ojal oval, que nos estarían hablando de piezas privadas utilizadas en el ámbito personal de los habitantes, que denotar ya un claro grado alto de aceptación de la cultura romana y que podemos fechar cronológicamente hacia la mitad del siglo I después de Jesucristo.

De vidrio poseemos diversos recipientes de diferentes formas y medidas relacionados con su uso personal (como ungüentarios, pequeñas copas decoradas,.) También van a variar su colores, entre el blanquecido, a verde, azul,..

Fueron recogidas diversas cuentas de collar o pulsera de pasta vítrea, que presentan diferentes medidas, formas (circulares y cilíndricas) y colores. También de este material se encontraron varias fichas de juego pequeñas y circulares, solamente de dos colores: blanco y azul.

Para finalizar, como una pieza fabricada con una piedra semi-preciosa, destacamos es el entalle de ágata de color azul claro, perteneciente a un anillo de bronce, que nos presenta la representación de una cuadriga con su auriga. Sus pequeñas medidas (11 x 7 x 2 milímetros, largo, ancho y grueso, respectivamente) nos hablan de un producto de elaborada fabricación y procedente de talleres especializados del Mediterráneo. El tema que nos muestra, lo veo representado muy habitualmente en época republicana, pero nuestro ejemplar podemos datarlo hacia mediados del siglo I después de Jesucristo.

Nota.- En las fotografías que ilustran este comentario, objetos de bronce que se exponen en el museo Quiñones de León” de Vigo: fíbulas, alfiles de pelo y el conjunto de tijera, dedal y aguja